Iglesia Junior

Aceptar a alguien es permitir que la persona aceptada sea parte de un grupo, una comunidad o un lugar. Jesús nunca despreció a nadie, al contrario, siempre los invitaba a participar de su grupo o su reino.
Como habrás visto en la historia, nos puede pasar de estar a veces en lugar de Eusebio o en el lugar de Dionisio.  Lo importante es darse cuenta de que todos necesitamos pertenecer a diferentes grupos, en especial los que son de la Iglesia.
En la Biblia encontramos la historia de la Mujer Samaritana en Juan capítulo 4, una mujer que era de Samaria, un pueblo que no se llevaba bien con los judíos, a la cual Jesús invitó a conversar con él sobre el reino de Dios y gracias a que ellos hablaron, muchas personas de Samaria llegaron a conocer a Jesús.

Versículo para memorizar:  “…Tanto el que siembra como el que cosecha se alegran juntos”.  Juan 4:36 (NBV)

Para Jesús lo más importante es que aceptes a los demás y los invites a conocerlo, ya sea por medio de los grupos de la Iglesia o por medio de los GC. Por eso, el que siembra (invita) y el que cosecha (habla) son igual de importantes y ambos se alegran. Pensá en alguien para invitar o para hablarle de Jesús e invítalo para que participe de algún GC o de nuestra Iglesia.
Encontrá las palabras y después escribí la historia con tus palabras y las del acróstico.